lunes, 23 de diciembre de 2024

La cifra impar, film dirigido por Manuel Antín, una adaptación del cuento Cartas de mamá, de Julio Cortázar en el Museo del Cine

 

 



 


(Buenos Aires)

El sábado 21 de diciembre se proyectó en el Museo del Cine, dentro de un ciclo de homenaje al director Manuel Antín, su ópera prima La cifra impar (1962) adaptación del cuento Cartas de mamá de Julio Cortázar.

Cartas de mamá encabeza el libro Las armas secretas del autor argentino.

La trama incluye a dos personajes, Laura y Luis, intepretados por María Rosa Gallo y Lautaro Murúa, un matrimonio que se va a vivir a París escapando de la realidad: el hermano de Luis, Nico, interpretado por Sergio Renán,  un hombre enfermo que ha sido novio de Laura y que ella deja para casarse con Luis, se muere.

La madre de Luis y de Nico, personaje que interpreta Milagros de la Vega, se queda viviendo en la vieja casa del barrio de Flores, en Buenos Aires, y le escribe cartas a Luis, detallando los pormenores de su vida.

En el  intercambio de cartas entre Luis y su madre, Laura se mantiene a la expectativa.

Y entre Luis y Laura se instala un silencio pernicioso, nadie quiere nombrar a Nico, personaje  que va cobrando fuerza, a medida que transcurre el tiempo y  sigue con el intercambio de cartas.

La presencia de Nico muerto produce un distanciamiento emocional entre Luis y Laura.

La inquietud más grande se produce cuando la madre de Luis nombra a Nico en una de sus cartas, anticipando un viaje de éste a París.

A partir de ese momento el cuento toma un giro hacia un final que puede ser fantástico, y se abre a distintas lecturas.

El film muestra escenarios de París y de Buenos Aires y reconstruye la historia de Luis, Nico y Laura y la vida de los hermanos y la madre en la casa de Flores. 

 En las cartas de la madre los detalles irrelevantes, como los avatares del perro y de los vecinos se va configurando la idea de una vida rutinaria y encerrada entre cuatro paredes y los recuerdos.

La vida de la pareja de Luis y Laura en París, transcurre en una monotonía entre el trabajo de Luis, las idas al cine, y la rutina diaria.

Nada de lo que ocurre ahí es lo que soñaron cuando emprendieron el viaje, empezar una nueva vida, ya que el pasado no se puede obviar y los persigue.

Tanto es el peso del pasado y de las cartas, que en el cuento el narrador en tercera persona dice al principio: "Muy bien hubiera podido llamarse libertad condicional. Cada vez que la portera le entregaba un sobre, a Luis le bastaba para reconocer la minúscula cara familiar de José de San Martín para comprender que otra vez más habría de franquear el puente. San Martín, Rivadavia, pero esos nombres eran también imágenes de calles y de cosas; Rivadavia al seis mil quinientos, el caserón de Flores, mamá, el café de San Martín y Corrientes, donde lo esperaban a veces los amigos, donde el mazagrán tenía un leve gusto a aceite de ricino...".

Filmada en blanco y negro, La cifra impar es un buen film y una buena adaptación del cuento de Cortázar.

 El film fue premiado con el Cóndor de Plata al mejor director, mejor actor para Lautaro Murúa y mejor actor de reparto para Milagros de la Vega.

 bibliografía: Julio Cortázar, Las armas secretas, editorial Sudamericana, Buenos Aires, 1986, vigésima edición 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

comente esta nota